Esta ermita de arte románico fue construida en 1713
en honor a San Xiao (San Julián). A pesar de ser relativamente reciente,
el Alto de San Xiao ya había sido foco de peregrinación desde épocas
anteriores.
Entorno a esta ermita se celebran dos
romerías, la de San Xiao el 27 de enero y la de Nuestra Señora de las
Angustias el primer domingo de julio.
En los
alrededores de la capilla persisten contados robles, castaños y
alcornoques coetáneos a ella y que fueron los únicos representantes de
la vegetación del Aloia en su pasado pedregoso, aún cuando no se habías
iniciado las reforestaciones impulsadas por Areses.
Además,
en sus proximidades, se pueden ver unas largas escaleras que conducen
hasta la fuente del santo y que están recorridas a ambos lados por mesas
(merenderos) y árboles de gran porte.